El presidente español, Pedro Sánchez, obligó a los partidos a iniciar una campaña a contrarreloj, en los que, según apuntaron analistas a Télam, si la izquierda va dividida no tiene chances de ganar a una derecha tradicional que demanda los votos de la ultraderecha, con la que tiene una ríspida convivencia.
Comentarios
¡Sin comentarios aún!
Se el primero en comentar este artículo.
Deja tu comentario