Ambos países rechazan la reforma que impulsa un mecanismo para redistribuir entre los Estados miembro a los migrantes que llegan de forma irregular al continente. Macron consideró "secundario" la falta de consenso porque los asuntos migratorios en el bloque se deciden por mayoría calificada y pidió "no hacer fetichismo" del texto final.
Comentarios
¡Sin comentarios aún!
Se el primero en comentar este artículo.
Deja tu comentario